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La incorporación a la Escuela

 

La incorporación a la escuela de niños con Síndrome de Lowe se aborda a los tres años. Lo habitual es que nos llegue la notificación de que debemos escolarizar a nuestro hijo y/o que nos lo comenten en el centro en el que se realiza la estimulación precoz.

Como se puede suponer no hay una única receta para abordar el tema de la escolarización. Son muchas las variables que entran en juego y cada padre debe analizarlas y tomar una decisión, ya que esta dependerá del nivel de afectación y maduración de cada niño.

Sí que es interesante saber que en cada comunidad autónoma existen unos equipos de valoración, en el caso de Catalunya son los "Equipos de Evaluación Psicopedagogica". Según la legislación estos equipos deben emitir un dictamen sobre las posibilidades de escolarización del niño.

Hay que tener en cuenta que los niños con Síndrome de Lowe, por sus características físicas y psicológicas tienden a parecer más pequeños de lo que indica su edad biológica. En estos casos una alternativa adecuada y que ya se ha realizado con algunos de los niños de la asociación es la escolarización en escuela ordinaria, pero en un curso inferior al que le correspondería por edad. Por ejemplo un niño al que por edad le corresponda cursar P3 podría cursar P2 si el equipo de valoración, y los padres, consideran que tanto a nivel físico como de desarrollo intelectual podrá relacionarse y evolucionar mejor en un curso inferior que en el que le corresponde por edad.

Las experiencias al respecto, aún pocas, nos dicen que el tema de la escolarización es complicado por la poca flexibilidad de algunos profesionales que intentan aplicar fórmulas generales a situaciones particulares.

En caso de no estar de acuerdo con el dictamen que emiten los equipos de valoración, se puede, y consideramos que se debe, escribir a los consejeros de Educación de cada Comunidad Autónoma y a cualquier instancia que (Defensor del niño por ejemplo) que pueda hacer prevalecer los derechos de nuestros hijos a recibir una educación no mediatizada, más de lo imprescindible, por su deficiencia.

Cabe mencionar en este apartado que para los niños afiliados a la ONCE esta organización pone a la disposición de los colegios, una serie de equipos de profesionales que asesoran a maestros y profesores sobre como adecuar el currículum a las necesidades de los niños, como organizar algunas actividades y en definitiva como desenvolverse con un niño con déficit visual.